lunes, 9 de noviembre de 2015

Y será otoño

Reflejo en la Plaza Mayor de Salamanca. 3 de noviembre de 2015

Llegarás, ciertamente, a una plaza al amanecer.

Sonará el hueco del aire, y la hora apenas logrará deshilachar el rosado de la aurora que zurcen los vencejos.
Esto ocurre cuando los árboles se desdientan y pierden su sonrisa.

Será otoño, y cuando digas "Es otoño", se te caerá una hoja en los ojos.

Es tu plaza, en donde ahora deambulan ebrios estudiantiles como lo fuiste, y juega la juventud con el chorro de las máquinas del riego civil, como hicieras tú. 

Y pasan ya los funcionarios, y las secretarias de tantos secretos velados, y los dependientes hacia sus mostradores cada vez más vacíos, y los señores concejales con sus trajes tan carpetados; y los directores de la banca, y aquel anciano que trae miga para las palomas.

Y se perderán todos en la hora como gaviotas furibundas que no encuentran mar para sus vuelos.Como todos en su hoja laboral.
Te imagino viendo todo esto; la hornada primera de cada día, pensando en qué tahona se consumió todo aquel fuego que tenías, los sueños juveniles y toda esa calderilla de hojarasca que deja siempre el otoño en la identidad.

Pero mira por donde..., que llegan los escolares con sus carteras, espantando de los charcos esa hoja caída en tu nostalgia,con las mariposas del sueño aún en sus ojos, y cuyas risas son las únicas que sabrán bordar el futuro.

Y yo - si alguien me hubiera llamado a decir algo aquí- diría que la vida no olvida ni desdeña, que solo ejecuta continuas disidencias para seguir siéndote fiel, a ti, y a sí misma: a la prisa que son esos escolares que con sus pies rompen el reflejo de tu charco de nostalgia.

Llegarás, ciertamente, a una plaza en el alba. 

Recuerda: hará frío, y habrá de ser otoño gozoso y de frutos en tu alma.
Publicado en el periódico digital
Salamanca Rtv al Día,
domingo 8 de noviembre de 2015

Ángel de Arriba Sánchez
El Escribidor del Tormes